Por Gregorio Sogno - Especial

La realidad es una sola, surgen de los hechos.
Los informes de los contagios de coronavirus del Hospital de San Gregorio demuestran que ya la propagación, aun con el virus circulante, es menor y afortunadamente no hubo mas fallecidos. La incógnita ahora es sí zafamos o no de la variante Delta.

¿Qué pasó?
En mayo del 2021 nuestro pueblo tuvo su pico de contagio mas alto con 239 casos, que con los aislados llegaban a casi 400 personas. En junio la mayor cantidad de muertos con 13 personas (casi 1 cada 24 horas) con 155 contagios porqué en agosto tuvimos solo 16 casos y el último fallecido data del mes julio.
El gran remedio fue la vacunación. Hoy nuestro pueblo tiene el 73% de la población con la primera dosis colocada y el 54% con la segunda dosis puesta. Sí las vacunas hubieran llegado a tiempo no lamentaríamos las pérdidas de vecinos queridos de nuestro pueblo.

Muy simple
El 10 de diciembre del año pasado cuando México y un par de países latinoamericanos se aseguraban la vacuna de Pzifer, el entonces ministro de Salud de la Nacion Dr.Ginés Gonzalez Garcia, confirmaba que la Argentina no firmaba el contrato con Pzifer pese que al principio existía la posibilidad de que se nos entregara algunas en diciembre del año pasado y el resto de los 3 millones se conversaba entre enero y febrero.
El ex ministro decía que no se firmaba el contrato porque "no sabemos que es, pero ellos dicen que la casa matriz, que esto, lo otro". Fue ese mismo ex ministro, que cuando llego el coronavirus a Argentina, dijo "no creería que llegara tan pronto".
Argentina apostaba por la Sputnik V, y de Rusia se pedía a la Anmat (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) su autorización. Se ponía en marcha un proceso de sesgo ideologico en la vacunación
El 29 de diciembre en Argentina comienza a vacunarse con la vacuna rusa al personal de salud y así seguirían personal esencial, etc, etc. Mientras millones de argentinos se contagiaban y morían en soledad apareció el "vacunatorio Vip" con dosis colocadas a políticos, periodistas, etc, etc. Nadie quería esperar su turno.
Pasamos una cuarentena eterna por un DNU firmado por el presidente de la nación mientras su esposa festejaba su cumpleaños con el presidente incluido y un grupo de personas en Olivos.
En abril de este año llegaron las vacunas a San Gregorio y el maravilloso equipo del Hospital de San Gregorio se puso a trabajar con la Dra. Alicia Simón como directora, Lucas Giraudo jefe de enfermería y todo el personal profesional y no profesional.
Al viernes 10 de septiembre se vacunaron a 7.890 personas, incluidas personas de Diego de Alvear y Christophersen, entre primeras y segundas dosis.
Hubo en nuestro pueblo 720 pacientes detectados de coronavirus en el Hospital desde inicio de la pandemia, pero hubo muchos más si incluimos a pacientes internados en la sanatorio privados que no pasaron por ese nosocomio, y lo peor 22 muertes dolorosísimas.
Vivimos un mes de junio de terror; se morían vecinos ante nuestra vista, murieron familias enteras. En mi barrio a menos de una cuadra de la plaza fallecieron cinco personas afectadas por coronavirus y a consecuencia de haberlo padecido. Hasta el momentoen el país se registran 113.282 fallecidos
Nuestras vidas nunca serán iguales a antes de la pandemia. Si las vacunas hubieran llegado a tiempo no lamentaríamos tantas victimas inocentes. Así de simple.

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